Hoy, hace un par de horas vi el documental de Luis Mandoki "Fraude: México 2006".
La verdad es que desde aquél repulsivo día (2 de julio de 2006) perdí toda esperanza de que se lograra algo en contra del fraude electoral que, desde mi punto de vista y de muchos era obvio y casi palpable.
Decepcionado de haber sido un mexicano más al que le robaron la democracia de las manos en su primera participación en una elección federal, decidí hacerme a un lado y mirar de lejos los acontecimientos posteriores para solamente tratar de comprender cómo es que pudo ser posible que México fuera víctima una vez más de un engaño de este tipo, y decepcionado -aun más-, de que el país no cedió a quitarse la venda de los ojos -aún cuando un hombre respaldado por sus representados casi lo logran-...
Hace 24 años pudo haber sido coraje; hace 18, sorpresa (shock); hace 12 años pudo haber sido esperanza el resultado del proceso electoral mexicano, pero hace seis años debió ser vergüenza al tener ya en esos tiempos los elementos necesarios y 'el camino un poco más despejado' para lograr una elección federal más transparente y sólo haber conseguido un fraude suficientemente documentado pero finalmente 'aceptado' por los mexicanos.
Y precisamente vergüenza es lo que siento al ver hasta estas fechas el documental de Mandoki, que por cierto ha estado disponible desde 2007 y nunca me di tiempo para enterarme de los hechos reales, aunque pensándolo bien y dada la coyuntura política actual (a poco menos de 60 días de la elección federal 2012) creo que este es el momento ideal para verlo por el tipo de contenido que trata, desde evidencia directa de las irregularidades en boletas y actas, hasta la manipulación mediática sobre la imagen de Andrés Manuel López Obrador (para convertirla en negativa ante los ojos ciudadanos), y claro, abarcando también los polémicos temas de Reforma y Zócalo y el por qué de ellos.
El documental está ahí y lo dice todo, véanlo y actúen en consecuencia, los invito.
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